Mañana madrugamos

- qué pasa?
- quiero que lo dejemos.
- qué?
- sí aunque después volvamos, pero de momento lo dejo.

- lo dejas?
- sí que dejo la relación, que dejo de estar contigo vamos que...
- sí, si te he entendido muy bien, pero...
- y luego volvemos
- ¿pero tú te crees que yo soy gilipollas o qué?
- ¿por?
- ¡me dejas un tiempo, el que tú quieras y luego cuando tú quieras volvemos y todo porque tu lo debes de tener todo planeado!
- no, volvemos cuando queramos las dos.
- ¡¡pero tú no te das cuenta de que si me dejas es para siempre, que no te quiero volver a ver en mi vida!! pero es que eres consciente de lo…
- eh...no, no, ¿cómo?
- ¿pero eres idiota o qué?, ¡¡que no te quiero ver más!!! que me arrepiento de haberte conocido incluso.
- qué de tópicos se dicen sin pensar...
- ¿te estás burlando de mi?
- no, si me parece normal tu reacción, bueno hasta un punto, claro...
- ¿cómo que hasta un punto?
- a ver, hasta un punto...de momento no hay nada de verdad en lo que dices...
- ¿esto es una broma no?
- bueno, al menos ya dices lo que piensas. No es una broma, es lo mejor que nos puede pasar ahora
- ¿Porque tu lo dices?
- No.
- Hay otra, estás con alguien ¿eh? ¿es eso no?
- que va que va, ¿te burlas tu de mi? a ver, ¿tu sabes lo que voy a llorar por ti? ¿sabes la cantidad de noches que voy a pasar sin dormir?
- ¡Pero a mí que me importa! ¡como si te mueres!
- Sí eso estaría bien, o una guerra o algo así, pero en este tiempo, no hay nada de eso, y al final el amor se vuelve insípido, y no quiere decir que no haya amor, pero ¿el amor de qué se alimenta? al final es un horario más de trabajo...
- (llorando) ¿sabes lo que te digo? que tienes razón, que...
- perfecto, ¿preparamos la cena?
- joder, ¿pero qué hora es?
- es que son casi las once, cariño.
- vamos, entonces, que mañana madrugamos...